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miércoles, 19 de diciembre de 2012

Hacia otra muerte







Podrían ser los mismos zapatos, el mismo pantalón, la misma camisa.

Podría ir en la misma calle, a la misma hora.

Podría acostarse con la misma mujer y decirle las mismas palabras.

Podría soñar el mismo sueño en ese mismo bosque con la misma bruma y el mismo helor y la incertidumbre de no saber donde queda el norte ni donde el sur.

Podría sentarse en la misma silla y comer el mismo platillo y ver por entre las mismas cortinas las mismas ventanas del edificio de enfrente.

El mismo edificio, los mismos colores, los mismos personajes, las mismas palabras, los mismo gestos.

Los mismos ruidos en la noche. Las mismas llaves las mismas cerraduras.

Las mismas paredes. Los mismos árboles.






Pero un día en otra hora, desbaratado el avispero de los pensamientos, con las manos apretadas bajo la sensación de los abismos, con el sudor chorreando desde la nuca hasta los talones, parado a orillas de otro tiempo, tocaría las otras nubes, las otras sombras.

Escucharía otros ritmos.

Acariciaría otra mujer, otra cara, otros labios.

Serían otros los ojos, otras las pestañas.

Ya no estaría en el mismo cuarto piso.

Viviría en otro edificio, en otra calle, en otra ciudad, en otro continente.

Pensaría con otra lengua. Meditaría con otras imágenes.

Vendrían otros sueños. Otros miedos. Otros terrores.

Tendría otro nombre. Otro cuerpo. Otra historia.

Tendría otra muerte.




2 comentarios:

  1. No sé si es tan bueno cambiar la rutina por una muerte distinta. Pero tal vez sea la mejor manera de ponernos en paz con nosotros mismos y de reconciliarnos con nuestra otra mitad. Con el reverso de la moneda que somos.
    Un abrazo, Bocanegra. Feliz Navidad.

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  2. La rutina es la certeza de que estamos vivos, me parece, pues en la rutina se da la repetición, y la repetición es lo insustituible. Lo bello del arte (((entre muchas otras cosas)))es que hace posible vivir la tensión de los opuestos, y en medio de estos la experiencia del sujeto estético, que a veces coincide con el hacedor del objeto; sea éste un poema,una canción, un cuento, un cuadro o un ensayo.

    Muchas gracias, Blanca, y lo mismo te digo: ¡¡¡Felices fiestas y estupendo año venidero!!!

    Un abrazo

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Gracias por asomarte a este blog de instantes

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