El otro día leí lo que sigue. Da lo mismo si fue en la tarde o en la mañana. Tampoco importa la fuente donde aparecieron las palabras y las imágenes.
Lo que verdaderamente importa no está de este lado de mis dedos, ni de las explicaciones que tantos otros pudieran dar.
Lo que importa, lo que verdaderamente importa, está del lado de allá, donde no dejan de ocurrir los hechos.
El Senado de Estados Unidos aprobó hoy por
unanimidad otorgar al Pentágono fondos suplementarios valorados en 225 millones
de dólares para financiar el escudo antimisiles de Israel conocido como
"Cúpula de Hierro".
"Estamos con los israelíes, porque si no
tienen la 'Cúpula de Hierro' no pueden defenderse", aseguró el senador
republicano y ex candidato a la presidencia del país John McCain.
Así va la realidad que me aturde, cuando leo que ha ganado un premio de literatura el perfecto escritor, creyente de la belleza eterna en las palabras.
Me duele el pecho. Supongo que es por la docena de cigarrillos que fumé sentado al filo de la azotea.
La alta comisionada de Naciones Unidas para los
Derechos Humanos, Navi Pillay, denunció el jueves los proyectos de Washington
de devolver a sus países de origen a los menores en situación irregular
provenientes de América central. "Hay unos 57 mil menores solos en Estados
Unidos. Estoy especialmente preocupada, ya que Estados Unidos parece estar
dispuesto a devolver a una mayoría de ellos", declaró Pillay a los
periodistas en Ginebra.
Para Washington, esta llegada masiva es una
"crisis humanitaria". La mayoría de los niños vienen de El Salvador,
Guatemala y Honduras, de donde huyen de la pobreza y la violencia. Según
Pillay, hay que ofrecer un techo y cuidados a estas jóvenes víctimas. "La
devolución [de los menores] únicamente debería llevarse a cabo si se garantiza
su protección en los lugares donde irán", declaró.
Permanezco afuera
afuera permanezco
sin alegría
triste permanezco
) ) ) )
triste permanezco
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))))))))))))
O O O O O
sirvo café en la taza de todas las tardes
y salgo al patio a contemplar el cielo.
allí dejo que mis ojos se pierdan,
que mis pensamientos hagan
remolinos en las ramas
del guayabo.
permanezco allá afuera
O O O O O
sirvo café en la taza de todas las tardes
y salgo al patio a contemplar el cielo.
allí dejo que mis ojos se pierdan,
que mis pensamientos hagan
remolinos en las ramas
del guayabo.
permanezco allá afuera
triste
hasta fumar con tristeza
el cigarrillo número cincuenta y nueve.
“ojalá no hubiera nacido nunca”, me lo digo
“ojalá no hubiera nacido nunca”, me lo digo
triste.
en ese momento llega un pájaro
en ese momento llega un pájaro
y se posa en las ramas del guayabo:
su canto hace que me olvide
hasta de la tristeza de mí mismo.
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))))))))))))
O O O O O
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