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viernes, 17 de junio de 2011

Apariciones

I
Es una horizontal
De madera
Y sobre ella la carne
De dos piernas que yacen
Sobre un triángulo
Perfecto de sombra y de espera
Que se aprieta con el parpadeo.

II
Va y ven  la boca
Verdad triste
Verdad obscura:
Me nacieron más orillas
En el corazón.

III
Su cara en el pecho del muchacho:
Tal vez, olor tibio a yerbas y tierra.
Los labios de ella se abren y sueltan
Tal vez, el silencio de unos sueños.

Es de noche: perfecta madrugada.
Luna entera y pausado ritmo en la garganta.
Respiración de calma y sombra.
Luego sucede que las nalgas
De ella, naturalmente,
Son alegria rodando
En la silueta inerte
De los huecos que se abren
Para los besos del muchacho

Y la muchacha durmiendo
En la perfecta madrugada.

IV
Sensación de extrañamiento:
Cuerpo que se dobla
Sobre las invisibles formas
De otro mundo.

V
Dicha pasajera
Que se escurre en las paredes
De cristal.
Sonrisa ahogada en un rictus
De tarde.

VI
Cuerpo que ignora las palabras:
Papel arrugado
En los puños del silencio.

VII
Grito:
Un solo instante
Y el eco atorándose
Entre lágrimas de noche.

2 comentarios:

  1. Me gusta este poema, tus versos tienen fuerza y encanto.

    Siempre es un placer leerte.

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  2. Gracias, Carlos. Ocurre que veces la palabra me jala por el rumbo de la libertad plena.

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Gracias por asomarte a este blog de instantes

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