Buscar este blog

lunes, 11 de diciembre de 2023

En horas de cadáveres

 

Mi error fue ser el que no era

 

Imprudente fue caminar a donde no iba

Jamás a donde no iba

No iba

 

 

Jamás debí entrar en ese espacio

de horas muertas

 

Ahora

Ya no sé quién mira en el espejo a quién

Quién es el que dirige mis pasos

 

 

Más que una duda

Un saber helado

De peste apresada en instantes

 

Horas de cadáveres y de nombres descompuestos.

Horas de cadáveres y de nombres descompuestos.

Horas de cadáveres y de nombres descompuestos.

 

Hundo la cara en agua helada y algo se detiene

Entre mis ojos y el hueco oscuro nadan

Peces de piel dorada y negra

 

Sé que un minuto más y

todo mi cuerpo caerá

en profundidades sordas

ensordecedoras en la máquina cósmica

que me arrebata

que me destroza

y que me muere

 

 

Me muere en la boca

Sitio donde nunca fui el que hablaba.

 

La tarde hasta mis pies ha llegado

Y sienten la noche en los poros

Irrepresentable como un soplo

Y caigo

cuando todo se oscurece

 

Espero que ofrezca sueños la madrugada

Espero que ofrezca sueños la madrugada

Espero que ofrezca sueños la madrugada

 

 

Y las moribundas células no dejan de decirme:

no dejan de decirme:

“Estás muriendo en el que nunca fuiste”

Estás muriendo en el que el que nunca fuiste

                                                                                                                          el que nunca fuiste.





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por asomarte a este blog de instantes

Sombras en la herrumbre

Y cuando hubo abierto el séptimo sello, siguióse un silencio en el cielo, cosa de media hora. Apocalípsis El cielo se llenó de satélites, de...