había sido programada la operación para el 14 de este mes, que
termina, precisamente, mañana
jueves
era necesario extirparle la confusión que había nacido en su mente
desde hacía varios años,
desde que le dijeron que su nombre no aparecería más en el
registro
de exploradores oníricos,
desde entonces la mirada se le hizo agua
en polvo negro, y entonces le pareció que a los días se les había
borrado las tardes, y a las madrugadas se les había olvidado
el rosicler de las auroras de otoño
para quienes se preocupaban por el confundido ser,
la operación les acabó pareciendo un fracaso
la realidad se impuso en ellos, en tanto que en el que ahora yace
convaleciente,
la realidad fue atrapada por una pesadilla que lo tiene,
en este mismo instante,
gritando de desolación y hambre