una cifra
-y no es cualquier cifra-
llega un día y hace que se viva
en otro día de otro año
-no como cualquier otro día
ni como cualquier otro año-
es saber que ya no se sabe lo mismo
que ya no se siente lo mismo
que todo se ha vuelto de pronto
diferente
distinto a partir de ese instante
en que la cifra pudo hacer
del día otro día
distinto
distante de aquel día
en que se originó la historia
de un yo cifrado
diferente de otras cifras
y de otros yoes
con otros nombres
y en otras partes
00000
//////
:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::
Muy bueno.
ResponderEliminarGracias, Santiago, por dejar un comentario. Saludos desde la cifra.
ResponderEliminar