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domingo, 8 de septiembre de 2013

En la otra orilla



Para Eduardo Arrona, artista de la imagen. 

Ejemplo de esta afirmación 
está esto que aparece aquí, 
precisamente aquí debajo:







No pertenezco a nadie,
 no asisto a Iglesia alguna, 
no creo en Dios ni en el hombre;
pero me gusta contar las fresas
cuando  como los domingos.


Lezguievo  Znahda



Y mírame ahora. Yo te pienso. 
Tú te asombras, tal vez, de que esté tan lejos.
Así está bien:
Yo del otro lado de tus ojos, y tú del otro lado de mis pensamientos.
Pero no he llegado hasta aquí para hablar de las distancias y de los contratiempos, ni he hecho el viaje de los horrores para estrechar tu mano y constatar, una vez más,  las formas de todos los días. Me parece que sería tanto como levantarse de la cama y gritarle al mundo que hay un cuerpo lleno de miserias.
Mejor será estarnos quietos, callados, respirando, y flotar, sobre todo, en los fondos grises del olvido.
Ya estarás preguntando por qué tanto tiempo vivir con las ropas de todos los días, por qué asomarme a las noches y derramarme en los rebrillos de la fiesta prostibularia, por qué no ir al parque y dormirme de una vez para siempre, con la boca y los ojos abiertos al infinito.
Pero no voy a contestar a ninguna de tus preguntas, no voy a soltar la lengua para untarla con licores, ni echaré el cuento de los apátridas ni de los marginales que pululan en los corredores de esta otra urbe.
Lo repito:
Mejor será estarnos quietos, callados, respirando, y flotar, sobre todo, en los fondos grises del olvido.

Todo lo demás sólo sería constatar la expulsión de lo ya sabido por nosotros.


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5 comentarios:

  1. Venga, caro amigo, que en el repiqueteo de tanto parpadeo sigamos con la comezón del alma.

    Bello, en la poe´tica del claroscuro.

    Gracias demás!

    Abrazos.

    elDú

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  2. ay en sus ojos una extraña paz, que coincide con los fondos grises del olvido. Me gustó mucho, por favor otra, otra!

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  3. Hola Penélope,

    Ya vendrá la otra, y la otra, y así, hasta caer en el más absoluto silencio.

    Un abrazo

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  4. Cómo me ha gustado, pura emoción, qué bonito, amigo!! Me gusta pasar por aquí y verme sorprendida en tu emboscada de palabras.Grande.

    besos

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  5. Gracias, querida Miette, como siempre, tan a juego de las palabras que suenan en el Instantario.

    Un abrazo

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