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martes, 20 de septiembre de 2011

Atisbos


I
En un punto del camino
apareció la insinuación de algo
impensable.
Apenas era el atisbo
de una mueca borrosa
en la madrugada.
Hacerla cierta, es decir,
hacerla pronunciable en las justas
sílabas de eso que temblaba:
fue imposible.

II
Qué lentos vamos a vivir la eterna muerte.
Qué obsesión de esperar y dibujar y vaciar
En la piel de las orugas lo mejor de siempre.
Qué absurdo pensar en que todo fue cierto
Sabiendo que, al final de cuentas, se perdería
todo, absurdamente todo
.

III
No me preguntes qué día es hoy.
No me quieras engañar
con tu tiempo de ternuras
o con tu risa de no me importa nada.
Hoy no tengo hambre ni sueño
ni piernas para saltar al otro lado
de la mentira y del soliloquio.
Hoy ya no sé adonde vamos
ni a qué horas nos esperan
aquéllos que indicaron el sitio.
Se olvida todo tan de repente
tan de repente y sin orillas
para encontrar el rastro.

IV
Ayer era un solo de arpegios rasguñando
en los párpados. Desplazaban color en las pestañas
y era emocionante desconocer los sonidos en que iban
las figuras destrozándose entre muchas formas
de silencio y de palabras en la tarde inoportunas.

6 comentarios:

  1. Me gusta. Deja un poso triste y amargo, pero me gusta. Muy buenos los poemas II y III.
    Saludos

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  2. A mi me ha emocionado el IV, entre parpadeos..
    Un saludo

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  3. Observo además de tristeza, y resentimientos contra algo o alguien.

    A veces es mejor dejar volar ciertas cosas y aprender también nosotros a volar, porque pisar tanto suelo a veces nos puede hacer hundirnos en la tierra y en la tristeza.

    ¿Te vienes a volar un rato? Abrazos :)

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  4. Blanca: La tristeza es mi luna.

    Mientrasleo: Gracias por tu visita, siempre será un gusto tener noticias tuyas.

    i-La que canta con Lobos: No hay resentimiento en mi corazón; hay desolación y tristeza. De la tristeza puedo decir que ha estado en mí desde que era un adolescente. De acuerdo, hay que volar y jugar más allá de las nubes.

    Abrazos como alas

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  5. Me gustan los 4, en especial el primero y el último. Tu lamento poético está lleno de fuerza.
    Saludos

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  6. Gracias, Carlos. Me alegra saber de tu visita y de tus gentiles palabras.

    Un abrazo

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